Para mí fue un básico, una ayuda para retocarme y para controlar brillos en el rostro. Soy muy calurosa y quería sentirme segura sabiendo que en mi neceser había papeles matificantes para eliminar brillos en mi piel o el labial con el que me maquillaron para poder retocarme durante las fotos, el banquete, la fiesta, ...
Igual que para mí fue un básico, me he dado cuenta de que muchas novias no lo tienen en cuenta. Y es que hasta que no necesitan un kleenex o una tirita, no caen en que un buen neceser de retoque les hubiera solucionado un montón de imprevistos. A mí me lo llevó mi madre hasta el final de la boda y durante las fotos lo llevé yo en el coche.
A continuación quiero contarte los productos que llevé en mi neceser de retoque y alguno más que hubiera incluido pero que no me di cuenta en ese momento. Serás una novia radiante y previsora!
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El primer producto que guardaremos en nuestro neceser de novia serán los pañuelos de papel por si se corre la máscara, para secar el sudor, evitar brillos en las fotos. Con ellos deberemos incluir también una esponja de maquillaje. Lo ideal sería usar productos resistentes al agua. Sabemos que es un día donde los sentimientos estarán a flor de piel y las lagrimas están aseguradas. ¡Ser precavidas y tener un pañuelito a mano!
Unos discos de algodón, una gota de esponja para aplicar maquillaje, un sobre con la base de maquillaje que me había aplicado, un tarrito con los polvos que me había aplicado, un espejo de mano, unas láminas para quitar los brillos, un tarro con vaselina y pinceles desechables... Un coletero, horquillas, tiritas, kleenex
Labios hidratados
Si has encontrado el labial con el color perfecto con el que dar vida a tus labios durante el gran día, no lo dejes muy lejos y tenlo siempre a mano.
Después de la ceremonia, antes de entrar en el lugar de celebración y tras el banquete, son los momentos ideales en los que darte un retoque. Tan solo tendrás que rescatar tu barra de labios de tu neceser de novia para seguir estando perfecta.
Fijación de maquillaje
El maquillaje de novia es especial, está más trabajado y, por lo general, con más producto del que se suele utilizar a diario. Una de las grandes preocupaciones de todas las novias es conseguir que su maquillaje permanezca intacto durante toda la boda. A veces se consigue, bien sea por la destreza de la maquilladora o por la calidad de los productos, pero por lo general se necesita algún que otro retoque pasadas unas horas para seguir igual de perfecta.
Aún así, no es normal llevar el día de la boda todo un arsenal de productos de maquillaje para seguir igual de bonita. Afortunadamente en el mercado existen otros productos eficaces que ayudan muchísimo.
El agua de belleza es un producto fantástico para novias. Un flis antes de todo el proceso de maquillaje basta para cerrar visiblemente los poros y alisar los rasgos, y usado justo después de la base de maquillaje se consigue prolongar la duración del mismo muchas más horas.
Guarda en tu neceser el Agua de Belleza de Caudalie. Desde la primera vaporización, percibirás las notas regeneradoras del benjuí y de la mirra, los extractos de azahar suavizantes, y de uva y de rosa iluminadores del cutis, el aceite esencial de romero conocido por sus virtudes astringentes y las esencias estimulantes de melisa y de menta.
Bien perfumada
Un imprescindible que no puede faltar en un neceser de novia es el perfume. Tanto si eliges el perfume de siempre como uno nuevo para la ocasión, recuerda perfumarte con suficiente antelación antes de ponerte el vestido, así te aseguras de no mancharlo ni mojarlo. Lo ideal es retocar el perfume con sutileza después del banquete, justo antes del baile. Con un pequeño toque basta.
Bruma facial
Con el paso de las horas, no solo te vendrá bien contar con un producto refrescante que alivie y suavice de inmediato la superficie de tu piel sino que, además, lo necesitarás si quieres retocarte adecuadamente el maquillaje. Como ya habrás oído en más de una ocasión, los productos de diferentes texturas (en polvo o líquidos) no pueden aplicarse de manera aleatoria sino que debe seguirse siempre un mismo orden para que se asienten bien en la piel y sus fórmulas no interfieran entre sí: primero los productos en crema y, después, aquellos que sean en polvo. ¿Qué ocurre entonces cuando, varias horas después, quisiéramos aplicar un poco más de corrector en la zona de la ojera que ya selló con polvo nuestra maquilladora? Teóricamente, seguiríamos sin deber aplicar un producto en crema sobre el acabado anterior pero, por fortuna, existe un truco súper sencillo que pone remedio al drama: hidratar el rostro con una bruma facial, dejar unos segundos para que penetre en la piel y, ahora ya sí, seguir con el retoque de maquillaje.
Corrector
Porque por mucho que existan fórmulas que prometan cubrir nuestras ojeras con absoluta perfección durante horas, en realidad muy pocos productos pueden sobrevivir sin daños colaterales a un torrente de lágrimas de emoción. Por ello, no está de más incluir un corrector fácil de trabajar para poder corregir (valga la redundancia) cualquier imperfección o resto de sombra de ojos que se desplace por debajo del párpado inferior.
Polvos fijadores
Del mismo modo que tu maquillador habrá sellado con polvo los productos en crema inmediatamente después de aplicártelos, si quieres que tu retoque de corrector dure unas cuantas horas más tú también deberías sellarlo con polvos fijadores. Si vas a utilizar unos nuevos que no hayas usado nunca antes, mejor huye de los traslúcidos y opta por aquellos que tengan un pequeño toque de color ya que los primeros, a veces, se ven blanquecinos cuando te hacen una foto con flash (y, sobre todo, cuando están mal aplicados).
Colorete
Generalmente, es uno de los productos de maquillaje que menos tiempo aguanta intacto. Los maquilladores suelen tenerlo en cuenta y tienden a cargar esta zona un poco más para que se vea bien en las fotos pero, al cabo de las horas, un brochazo de colorete para subir el tono de las mejillas y potenciar un efecto saludable será más que bien recibido. Evidentemente, deberías incluir también una brocha pequeña para aplicártelo (a no ser que optes por uno en formato líquido y lo apliques a toques con la yema de los dedos).
Kit básico de sombras de ojos
Puede que esto ya roce el nivel pro pero, en mi opinión, en un día tan especial más vale prevenir que curar. Al igual que ocurre con la máscara y los correctores, las lágrimas suelen estropear también la sombra de ojosy, si no contamos con un kit básico de sombras en tonos similares a los que llevamos (y una pequeña brocha para difuminar, claro), no hay manera de arreglarlo y que quede perfecto. Desde querer potenciar la sombra del párpado inferior porque ha perdido intensidad a intentar corregir los parches que se crean en el párpado superior después de llorar: no existe drama beauty que no podamos solucionar.
Labial
Uno de los grandes clásicos es preguntarle a tu maquilladora con qué labial exacto te maquillará el día de la boda (evidentemente, habiéndolo acordado primero el día de la prueba) y comprarte el mismo tono para poder llevarlo contigo en el neceser. De este modo, podrás retocarte tantas veces como lo necesites. Y apuesto a que lo harás.
Bálsamo de labios
Si desde el primer momento has optado por un labial líquido, de textura mate y larga duración, es posible que en algún momento de la noche tu labio comience a secarse y te sientas incómoda. En estos casos, antes de reaplicar el labial sobre el labio seco es aconsejable utilizar una pequeña cantidad de bálsamo para hidratar ligeramente la zona. Así, evitarás que se marquen tanto los posibles pliegues y mejorarás su textura.
Papeles matificantes
Si tienes la piel grasa, probablemente ya tengas unos papeles matificantesfavoritos que te acompañen contigo a cada fiesta que vayas (si la tienes seca, puede que ni siquiera sepas de qué estamos hablando). Lo bueno de estos productos es que apenas ocupan espacio en el neceser, no pesan nada y son súper eficaces a la hora de mantener los brillos bajo control.*
Toallitas limpiadoras
En general, soy de las que piensa que un paquete de toallitas limpiadoras en el bolso nunca está de más y puede salvarte de muchos apuros. En una boda, en la que vas a pasar horas y horas moviéndote, bailando y comiendo, no llevarlas me parece toda una temeridad. Y creo que no es necesario explicar por qué.
Desodorante
En la misma línea que lo anterior, tras horas de bailar y de andar de un lado a otro puede que, en algún momento, te apetezca asearte y refrescarte. Un desodorante tamaño viaje no ocupa prácticamente nada y, por poco glamuroso que resulte, llegada determinada hora puede ser necesario.
Perfume
Si tienes una versión en formato viaje del perfume que utilizarás, perfecto; inclúyela en el neceser para reavivar tu fragancia a mitad de la jornada. Si no, es tan simple como hacerte con un vaporizador de viaje (los hay extra pequeños) y rellenarlo con tu perfume. Ideal para concluir el momento del retoque y salir del baño fresca y renovada.
Lima de uñas
Dentro de todos los dramas beauty habidos y por haber, una uña rota el día de la boda es, probablemente, uno de los que más nos cuesta digerir (no digamos ya si las llevas largas). Contra semejante desdicha no hay mucho que se pueda hacer pero, al menos, asegúrate de contar con una lima de uñas para arreglar su forma y evitar hacerte enganchones en el vestido.
Esmalte de uñas
Hilado con lo anterior, también es aconsejable que incluyas en el neceser un esmalte de uñas del tono que vayas a llevar (o, al menos, lo más parecido posible), para arreglar uñas completas o simplemente una esquina que se haya descascarillado.
Tiritas y stick anti rozaduras
Abandono el terreno de lo estético y hago una pequeña incursión en el de lo práctico para recordar que siempre (en serio, SIEMPRE) hay que llevartiritas para aliviar o evitar posibles rozaduras en los pies. Es algo súper básico pero, con las prisas y los nervios del momento, a muchas novias e invitadas se les pasa por alto y no disponer de ellas puede suponer, sin exagerar, que terminen amargándote la noche. Si no llegas a tener herida pero sospechas que el zapato pueda hacerte daño, al menos hazte con unstickanti rozaduras que te ayude a prevenir su aparición. De verdad, te alegrarás de haberlo hecho.
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Emergencias con el vestido
Uno de los mayores miedos de cualquier novia es que el vestido se manche o se rasgue. Desgraciadamente, no es difícil que nos caiga algo encima del vestido durante el cóctel o que se nos enganche la cola en algún sitio. Al igual que la novia, el novio o cualquiera de los invitados puede tener también problemas similares para los que debemos estar preparados. Entonces, ¿qué debemos llevar?
Comodidad
Es tu boda y quieres bailar hasta altas horas de la madrugada y disfrutar con toda la gente que quieres. Para ello, es imprescindible que te sientas cómoda en todo momento. No olvides meter en el coche unos zapatos cómodos de recambio para aguantar durante horas bailando. Muchas novias se decantan por unas zapatillas Converse blancas, otras por cuñas de esparto del mismo color… Busca tu estilo y no te preocupes por el dolor de pies.
Si eres propensa a las rozaduras en los muslos, compra ya mismo una crema antifricción. La encontrarás en muchas tiendas de deporte, y te aseguramos que evitan el roce durante horas y horas. Además, si te rozan los zapatos, también pueden ser útiles para evitar ampollas.
Por último te recomendamos llevar un pequeño abanico, especialmente si tu boda es en verano. Los nervios pueden hacer que sientas todavía más calor del que realmente hace. Además, existen algunos modelos preciosos de encaje blanco que te darán un toque de elegancia todavía mayor.
Salud e higiene
Belleza
Como hemos dicho al principio, para cualquier novia es esencial estar radiante el día de su boda. Por eso, te recomendamos unos pocos productos que puedes añadir a tu kit de novia para estar preciosa de principio a fin.
Como verás, y aunque la mayoría ocupen muy poco, el kit básico de novia incluye muchos elementos. Como siempre te recomendamos, deja que sea tu Wedding Planner quien se ocupe de todo ello. Vuestro único trabajo ese día tiene que ser disfrutar de cada segundo. ¡Deja que otros se ocupen de las preocupaciones! No dudes en contactar con nosotros si quieres concertar una cita sin compromiso para hablar de tu boda y resolver todas tus dudas.
Quieres verte a ti en el espejo o a otra persona? =D
Un besote!
Marta
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